Informe Especial: Mujeres desaparecidas en el Putumayo – Presentación

Este informe está dedicado a la memoria de las víctimas de desaparición forzada del Putumayo, de las mujeres, niñas, y hombres indígenas, afrodescendientes víctimas de este crimen de lesa humanidad, y es un reconocimiento a la lucha humilde y digna de sus familiares y de las organizaciones de mujeres y sociales de la región que aportaron su valiente testimonio para que esta historia de impunidad conmueva las conciencias y no se quede en el olvido.

Las desapariciones forzadas se registran en el Putumayo desde finales de los años ochenta, perpetradas por grupos paramilitares y agentes del Estado aún son una práctica extendida bajo el conflicto armado. Los hechos y situaciones que se describen en el presente informe dan cuenta esta realidad, inédita para la verdad histórica en Colombia, que permanece en total impunidad, invisibilizada en medio de múltiples violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario que afectan especialmente a las mujeres, a comunidades indígenas y a la población de origen social pobre.

Los casos recogidos ocurrieron durante los años 1997 a 2009 en los municipios de La Hormiga, La Dorada, El Tigre, Puerto Caicedo y Puerto Asís, años cuando se consolidó un círculo vicioso de grave impunidad y reiteradas violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario perpetradas por parte de grupos paramilitares, miembros del ejército, de la policía, e infracciones al derecho internacional humanitario cometidas por la guerrilla.

Estos crímenes atroces se dieron en el marco de la disputa por el control territorial de los actores armados y de la lucha gubernamental antisubversiva y antidrogas en la región. Las desapariciones forzadas que se relatan se han dado en un entorno de exclusión, pobreza y discriminación que afecta a gran parte de la población Putumayense a pesar/o precisamente por las grandes riquezas petroleras, en recursos naturales y su posición geoestratégica en la zona fronteriza con Ecuador causa de diversos intereses económicos y políticos.

El presente informe está escrito desde la perspectiva de las víctimas y basado en sus testimonios. Es un primer esfuerzo de documentación y caracterización de la desaparición forzada en varios municipios del Bajo y Medio Putumayo, Valle del Guamuez – La Hormiga y El Tigre; San Miguel – La Dorada; Puerto Caicedo y Puerto Asís, de las formas en que se implementó, de la calidad de las víctimas, de los mecanismos de terror, de la dimensión de la impunidad que quedó instalada y que heredaron los familiares de las víctimas en su mayoría mujeres y niños, en medio de una cotidianidad de amenazas por razón de sus denuncias, miedo, analfabetismo y abandono humanitario.

Este informe es también un esfuerzo inicial de documentación de una grave realidad olvidada cuales son las violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario de la Comunidad Indígena San Marcelino sufridas en las últimas décadas y donde la desaparición forzada ha jugado su papel fragmentando el tejido social y todos los órdenes espirituales y organizativos de la comunidad Kichwa: Los principios de equilibrio, respeto, armonía y reciprocidad con la comunidad y con los seres sobrenaturales pierden su vigencia como referentes culturales en la comprensión causal de la enfermedad y la muerte y tienen como consecuencia inmediata el desplazamiento, la pérdida de la unidad familiar y el debilitamiento de la comunidad.

Este documento se divide en tres partes, en la primera se expone el entorno, las cifras y las características de las desapariciones forzadas en la región, en la segunda se presentan las desapariciones forzadas de mujeres mestizas, indígenas, niñas y jóvenes, en la tercera parte se abordan las desapariciones forzadas en la comunidad Kichwa resguardo de San Marcelino y un bosquejo de consideraciones sobre las desapariciones forzadas y la cosmovisión indígena, la cuarta es un Corolario sobre el estado de indefensión jurídica de las víctimas, la ausencia de verdad y la impunidad que rodea el 99% de los casos conocidos.

El informe cierra con un aparte de conclusiones y recomendaciones al Estado colombiano y a la comunidad internacional, las cuales se derivan del análisis de testimonios, del seguimiento a procesos judiciales y del intercambio con las víctimas, las organizaciones de mujeres de la región y la comunidad San Marcelino, en un esfuerzo de aprendizaje mutuo respecto de la desaparición forzada, un drama poco documentado, investigado y atendido en la región a pesar de los graves daños que ha producido y de sus impactos devastadores. La acción de la justicia y el esclarecimiento de la verdad de lo ocurrido con las víctimas de la desaparición forzada en general y de las mujeres desaparecidas, y población indígena afrodescendiente y campesina en particular, es una deuda pendiente del Estado en su conjunto incluidos el poder ejecutivo, legislativo y judicial, con las madres, padres, hijos, esposas y comunidades que todavía esperan el regreso de sus seres queridos.